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ENRIQUE CADÍCAMO - POETA DEL TANGO

enrique cadicamo tango
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enrique cadicamo tango argentinaEnrique Cadícamo es sinónimo de pura poesía. Las letras para tango que compuso son verdaderos poemas, llenos de imágenes y metáforas que nos inundan el alma de amor, misterio, melancolía... en fin, sus tangos nos transportan al Buenos Aires que alguna vez fue y que hoy sigue viviendo gracias a la genialidad de sus tangos. Cadícamo nació en la provincia de Buenos Aires el 15 de julio de 1900 y falleció el 3 de diciembre de 1999. Su nombre original fue Enrique Domingo Cadícamo y utilizó los seudónimos Rosendo Luna y Yino Luzzi.
Muchas de sus letras fueron cantadas por Carlos Gardel, con quien mantuvo varios encuentros en París, siendo el primero de ellos en enero de 1929.
Dentro sus tangos más famosos podemos nombrar:

- "Los mareados"
- "Por la vuelta"
- "Nostalgias"
- "Pompas de Jabón"
- "Muñeca Brava"
- "Vieja Recova"
- "¡Che, Papusa... Oí!"
- "Madame Ivonne"
- "Nunca Tuvo Novio"
- "Notas de Bandoneón"
Esta lista es, de más está decir, incompleta, ya que sus canciones registradas superan las 1200. Sus letras han sido interpretadas por eximios cantores como Carlos Gardel, Agustín Magaldi, Libertad Lamarque, Mercedes Sosa, Julio Sosa, y muchísimos otros.
Para empezar, transcribimos a continuación la preciosa letra de uno de sus tangos más conocidos:

"Nostalgias"

Quiero emborrachar mi corazón
para apagar un loco amor,
que más que amores un sufrir...
y aquí vengo para eso,
a borrar antiguos besos en los besos de otra boca....
Si su amor fue flor de un día,
¿Por qué causa es siempre mía esta cruel preocupación?
Quiero por los dos mi copa alzar
para borrar mi obstinación... ¡Y más la vuelvo a recordar!
Nostalgias... de escuchar su risa loca
y sentir junto a mi boca, como un fuego, su respiración...
Angustia... de sentirme abandonado,
de pensar que otro, a su lado, pronto, pronto le hablará de amor...
Hermano, yo no quiero rebajarme, ni pedirle, ni llorarle,
ni decirle que no quiero más vivir...
Desde mi triste soledad
veré caerlas rosas muertas
de mi juventud.
Gime, bandoneón, tu tango gris;
quizás a ti te hiera igual algún amor sentimental...
Llora mi alma de fantoche,
sola y triste en esta noche, noche negra y sin estrellas...
Si las copas traen consuelo, aquí estoy con mi desvelo para ahogarlo de una vez.
Quiero emborrachar mi corazón
para después poder brindar
por los fracasos del amor...


En este video tanguero, inestimable testimonio cultural e histórico del tango argentino, podemos encontrar esta lograda versión de Nostalgias, el tango de Cobián y Cadícamo en la vocalización de Hugo del Carril.

Tango Violines Gitanos: letra e interpretacion de Ignacio Corsini

El tango Violines Gitanos es un auténtico clásico de un tango con una identidad que signó toda una época, del que disfutaremos en este video donde canta el gran Ignacio Corsini, "El Caballero Cantor", baluarte del tango de principios del siglo XX.
Siendo otro excelente tema cuya letra pertenece a Héctor Pedro Blomberg, Violines Gitanos nos lleva a una atmósfera de los zíngaros inmigrantes, sus misteriosas fiestas y amores, evocando unos aires decimonónicos que sólo los tangos de Blomberg y Maciel (autor de la música) pueden reflejar como en un caleidoscopio plagado de personas que ya no están, amores terribles, sueños, y una vida misteriosa y atractiva de la que sólo queda el tango.
Un párrafo aparte merece la interpretación de Ignacio Corsini, el cantante que no pocos han comparado con el mismo Carlos Gardel, elegante portador de una voz inconfundible y un modo de cantar que revela el estilo campero de los tangos iniciáticos.

Presentamos también la letra de Violines Gitanos, y luego el video con la vocalización de Corsini y bellas imágenes de gitanos, algunas de época.

Los oigo en los caminos y sueño en el verano
de un pueblo que blanqueaba del sol al resplandor,
en la canción errante de aquel violín gitano
que pasó por la aldea de mi primer amor.
Venían de muy lejos y allá en el firmamento,
el sol que se moría doraba su cantar,
un cantar más antiguo que el camino y el viento
perdidos en los trigos maduros al pasar.

El cielo estaba rojo, dormíase la aldea,
los pájaros del campo ya no cantaban más.
Y yo me preguntaba, solo en mi eterna idea,
la seguiré esperando o no vendrá jamás.
El zíngaro bajaba de la vieja carreta,
el alma de los campos lloraba en su violín,
la zíngara miraba mis manos de poeta,
leía mi esperanza romántica y sin fin.

Llevábase el Pampero los cánticos de Hungría
y el sol en el camino rimaba otra canción,
la zíngara andrajosa mirando me decía:
"Vendrá la que tu esperas, vendrá tu corazón.
Espérala que un día vendrán sus labios rojos,
para llenar de llanto tu ardiente soledad,
vendrá desde otras tierras y en sus azules ojos
florecerá la estrella de tu felicidad."

Mis ultimas monedas caían en su mano,
partía la carreta con aspero rumor.
Allá lejos, muy lejos, en el violín gitano
otra voz me decía, tu morirás de amor.
Después en los caminos, los campos, las ciudades,
escucho los violines gitanos y al rumor,
me digo a mis ardientes y oscuras soledades,
que nunca vino ella, ni yo morí de amor


Letra: Héctor Pedro Blomberg.
Música: Enrique Maciel




Video: Astor Piazzolla interpretando Adion Nonino

En este hermoso video, que podemos ver en HD, el gran compositor e intérprete Astor Piazzolla interpreta su tema Adión Nonino.
La filmación, de la que afortunadamente podemos disfrutar ahora, corresponde a un concierto brindado por Piazzolla en 1985 en Holanda, ocasión en que se presentara junto a su orquesta, conocida como el "Quinteto Tango Nuevo".
Un clásico de Piazzolla, tema de exquisita expresividad y pleno de significado, una marca registrada del gran músico argentino, cuya composición entraña una curiosidad muy comentada en los cronistas del tango y del propio Astor, que detallamos.
Astor Piazzolla, ese argentino nacido en Mar del Plata y que conociera a Carlos Gardel en Manhattan tan sólo un año antes de la muerte de éste, había compuesto la ya magnífica obra "Nonino", mas en 1959, tras el fallecimiento de su padre, don Vicente Piazzolla, Astor decidió reescribir la obra, ya no para orquesta de cuerdas sino para bandoneón, violín, guitarra y contrabajo.
En este video podemos apreciar la belleza de Adiós Nonino, el tango que Piazzolla más amaba.



Tango argentino